El término médico de la inflamación de la vesícula es “colecistitis”. Las características principales de este tipo de dolor son variables de un paciente a otro, sin embargo, hay patrones que casi siempre son constantes.
¿Cómo identificar el dolor de vesícula o colecistitis?
Los síntomas que deben encender el botón de alarma son:
1) Dolor constante en abdomen posterior a comidas ricas en grasas
2) Dolor intenso debajo de la costilla derecha
3) Náuseas o vómito
4) Dolor de hombro o espalda derecha.
5) Fiebre o coloración amarilla de la piel.
1) Sentido de urgencia.
La colecistitis es una auténtica urgencia, existen pocas indicaciones para diferir su tratamiento definitivo. El único tratamiento eficaz para este problema es la extirpación de la vesícula enferma mediante una Colecistectomía. El avance tecnológico hoy permite realizar esta cirugía con una mínima invasión mediante una Laparoscopia o Cirugía Laparoscópica, que deja pequeñas cicatrices en la piel, con un mínimo dolor y una recuperación prácticamente inmediata.
La integración de conocimientos y los datos que “leemos” al explorar a un paciente son fundamentales para levantar una sospecha diagnóstica. Los estudios que se solicitan son pruebas confirmatorias y que nos arrojan datos importantes sobre la gravedad de la enfermedad.
2) Buscar un diagnóstico preciso.
Saber con certeza el origen del dolor abdominal requiere conocer la historia del paciente, la forma de inicio del dolor, analizar la forma de caminar, apreciar la coloración e hidratación de la piel, tocar y escuchar; cada paso es imprescindible para llegar al diagnóstico correcto, pero no suficiente.
